El estudio de la asociación Seas at Risk explica que los españoles consumen 60.207 millones de productos de plástico de un solo uso al año. Esta investigación también destaca que es casi la décima parte del total de toda la Unión Europea. De estos residuos, 3.500 millones corresponden a botellas de bebida, 1.500 millones a tazas de café desechables, 50.000 millones a colillas, 207 millones a envases desechables y 5.000 millones a pajitas para bebidas.
Para el conjunto de la UE, este estudio estima que se consumen cada año 46.000 millones de botellas de bebidas de plástico, 16.000 millones de tazas de café, 580.000 millones de colillas, 2.500 millones de envases desechables y 36.400 millones de pajitas. El informe señala que estos productos plásticos representan la mitad de todos los residuos que inundan las playas en Europa, «un problema que agrava la contaminación de los mares y océanos y cuya solución pasa por la adopción de medidas y herramientas ya existentes».
Este informe considera que deben prohibir la venta de estos productos o que los consumidores paguen una cantidad extra al adquirir el producto. «La contaminación marina es una grave amenaza para nuestros mares, especialmente en un mar cerrado como el Mediterráneo», explica Lydia Chaparro, ecóloga marina de la Fundación ENT y miembro de la coalición Seas At Risk.
«De no adoptar medidas los gobiernos y la propia Unión Europea, las afecciones sobre la biodiversidad y el conjunto de los ecosistemas marinos podrían ser irreversibles», añade. Los expertos explican que debemos evitar los platos o vasos desechables, ya que son artículos muy contaminantes. Varios estudios han descubierto que en España se usan más de 80 pajitas por habitante al año. Tampoco es aconsejable comprar botellas de agua de plástico, ya que lo mejor es usar un filtro para los grifos de la vivienda. Y si en casa tenemos botellas podemos utilizarlas para crear manualidades.
El plástico convencional es un material muy contaminante, ya que está compuesto a base de elementos provenientes del petróleo. Es fundamental luchar contra la contaminación plástica porque la mayor parte de estas bolsas ni se reutilizan ni se reciclan. Desde el Instituto Tecnológico del Plástico explican que «es responsabilidad de quien usa un recurso que éste pueda ser valorizado correctamente después de su utilización. Su depósito en el contenedor correspondiente destinado a ello, garantizará que el impacto ambiental sea el mínimo posible».
Para reducir el plástico y apostar por los hábitos de consumo sostenible podemos evitar las bolsas de plásticos elaboradas mediante sustancias derivadas del petróleo y acudir a la compra con una bolsa biodegradable. Muchos españoles quieren un mundo más verde y apuestan por las bolsas biodegradables porque no contaminan el medio ambiente, y pueden descomponerse en nutrientes y biomasa.
Son resistentes y no requieren de materiales derivados de fuentes de origen fósil como el petróleo. Incluso, muchas empresas apuestan por estas bolsas porque saben que el plástico convencional, compuesto a base de elementos provenientes del petróleo, no se biodegrada y contamina. Además, estas bolsas mejoran la imagen de marca al mostrarle a los consumidores que son empresas que apuestan por la sostenibilidad y quieren un planeta más verde. Muchas farmacias utilizan las bolsas de plásticos biodegradables compostables porque buscan reducir el consumo de bolsas de plástico.
Además, son totalmente personalizables y pueden llevar el logo de la farmacia. Las bolsas biodegradables compostables pueden descomponerse de manera natural, y las farmacias pueden elegir entre una variedad de tamaños y diseños. Varios estudios han comprobado que pueden descomponerse de forma rápida cuando entran en contacto con bacterias, protozoos y algas. Estos productos son más respetuosos con el medioambiente, consumen menos agua y reducen la huella de carbono.
Los profesionales de Bioplásticos Genil, expertos en la fabricación de bolsas biodegradables compostables para farmacias, nos explican que estos productos cumplen con las normativas ambientales más estrictas, no dejan residuos tóxicos y deben ser depositados en el contenedor marrón para garantizar su correcto tratamiento.
Las bolsas biodegradables compostables sirven para transportar los productos de farmacia, los alimentos, la basura orgánica, etc. Estas bolsas pueden mostrar el nombre de la farmacia, se adaptan a los productos y necesidades de los clientes, y están fabricadas con materias primas procedentes del almidón de maíz o de patata. Las farmacias puede elegir entre diferentes tipos de diseños, ya que optan por las bolsas biodegradables con lazo o tipo sobre para guardar productos de cosmética farmacéutica. También utilizan las bolsas de asas y las bolsas con block porque son muy populares y se usan para el transporte de muchos productos. ¡Ya sabemos que estas bolsas no contaminan!